En todo el mundo, millones de aficionados y aficionadas gritan y apoyan a su equipo en la Copa Mundial Femenina de Futbol.

Sin embargo, no hace mucho, las mujeres tenían prohibido jugar a este deporte.

¿En serio? — en serio, sigue leyendo

Lara, a la que tantas veces le han dicho: "Las chicas no saben jugar al fútbol", está decidida a jugar al más alto nivel, como las mujeres que ahora ve por televisión.

Visita un campo de fútbol de cualquier localidad un sábado por la mañana y encontrarás a chicas increibles, dándolo todo.

Corriendo como locas, persiguiendo, defendiendo, jugando y marcando. Es algo tan normal para nosotros que no podríamos imaginar un mundo en el que no estuviera permitido o no se fomentara.

Viaje de 60 segundos a Brasil para ver a Lara en acción

***¿Sabías que...?

El 5 de diciembre de 1921, amenazada por el creciente interés y el número de espectadores, la FA (Asociación de Fútbol) prohibió el fútbol femenino oficial declarando: "El juego del fútbol es bastante inadecuado para las mujeres y no debe fomentarse".

En muchos lugares del mundo, la prohibición, en mayor o menor medida, duró décadas. En Brasil, uno de los mayores países futbolísticos del mundo, la prohibición no se levantó hasta 1983.

Una locura, ¿verdad?

La capitana de Brasil, Marta Vieira da Silva, dio una emotiva rueda de prensa tras el partido de la semana pasada, en la que señaló los extraordinarios esfuerzos que tuvo que hacer para convertirse en la jugadora e inspiración que es hoy.

¡Este es el aspecto de una superheroína!

¿Qué tiene esto que ver con World Vision? Todo.

Vayamos más allá del estadio por un momento.

Esta Copa Mundial Femenina se está celebrando porque hay un poder increíble de persistencia y defensa colectiva, independientemente del tiempo que lleve o de la causa que se trate.

Esto debería animarnos.

Jóvenes sirias se preparan para una tarde de deportes y actividades que promueven el juego, la paz y la resiliencia.

Rand Ishaqat

Lograr un cambio para las niñas no consiste únicamente en practicar deporte. Es un vehículo para la igualdad de oportunidades, para que las niñas ocupen el lugar que les corresponde dentro y fuera del campo.

Mientras las mejores jugadoras del mundo luchan por la Copa del Mundo, nosotros seguiremos haciendo nuestra parte, luchando por los derechos de las niñas y las mujeres en algunos de los lugares más complejos del mundo.

Echemos un vistazo a algunas de nuestras acciones en todo el mundo...

Unas niñas juegan al fútbol en un programa de World Vision en Indonesia.

Ben Adams

En Kenia, el fútbol se utiliza en nuestros programas de clubes de paz para fomentar la resiliencia, la armonía y la inclusión. Niños y niñas juegan juntos, lo que contribuye a promover la igualdad de género.

Martin Muluka

El torneo de fútbol femenino de Bangladesh "This Universe Needs Girls" combina deporte, empoderamiento y cambio social cultural en un acontecimiento asombroso. Aquí el pitido final ha sonado y los equipos están listos para la fiesta posterior al partido.

Suborno Chisim

Trabajamos con coherencia y sensibilidad en lugares como Afganistán, la República Democrática del Congo, Honduras, Líbano y Malí, donde la vida de una niña puede ser extremadamente difícil e injusta.

Las niñas se enfrentan a la violencia sexual, el matrimonio infantil, los secuestros, el trabajo forzoso, la desigualdad de género y la falta de oportunidades educativas significativas y de poder sobre sus propias vidas.

A veces la tarea que tenemos entre manos puede parecer un rival imposible, pero anímate, llevamos mucho tiempo en el campo y no nos iremos hasta que ganemos la Copa Mundial definitiva, en la que todas las niñas tengan derecho a construir el futuro que se merecen.

Estamos agradecidos de que estés con nosotros, por todas las niñas y todos los niños :)

¿Qué puedo hacer?

Es fácil sentir que todo es en vano en situaciones como esta, pero puedes estar tranquilo... tú, nosotros, todos juntos, podemos cambiar vidas. ¡Y eso es lo que hacemos!

Te dejamos tres formas diferentes para ser parte del cambio.

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    ¿Por qué la comida es más que una comida?

    Cada día, 690 millones de personas no tienen lo suficiente para comer. Podemos trabajar juntos para combatir el hambre y garantizar el acceso a alimentos nutritivos para todas las personas, independientemente de dónde vivan.

    Saber más
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    Dona

    Cada colaboración cuenta. Gracias a nuestro proyecto de Rescata la Infancia ayudamos a los niños y niñas que viven en los contextos más frágiles del mundo.

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    Concienciar sobre el problema es vital. Ayuda a otras personas a conocer la causa y cómo podemos conseguir erradicarlo, juntos.

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Revueltas sociales

En lugares donde las religiones y las culturas chocan, las cosas en las que confiamos para tener estabilidad -educación, costumbres sociales, respeto de los derechos humanos- pueden cambiar drásticamente para las personas de ese entorno.

  • La ocupación de Siria por el ISIS tuvo efectos drásticos en la educación de los niños, efectos que persisten hoy día. Como explicó un estudiante: "No voy a la escuela en este momento, tengo los estudios atrasados porque el gobierno de Irak no reconocerá la educación recibida durante la ocupación del Estado Islámico de la ciudad. Durante ese tiempo, todo lo que aprendimos fue sobre tanques, bombas y enseñanzas religiosas".
  • Las mujeres en la República Democrática del Congo viven en constante temor a la violación y abuso sexual. En 2018, las Naciones Unidas documentaron miles de casos de violencia sexual relacionados con el conflicto en la RDC, cometidos la mayoría por varias de las partes implicadas.